Más allá de un precio altamente reducido que las hace muy asequibles, la presencia del equipo, docentes, asistentes y practicantes en formación crea un campo que, por pura sintonía, facilita el acceso a todo un mundo de información sensorial sutil  que habitualmente suele permanecer debajo del umbral de la consciencia. Todas esas personas han dedicado años de estudio, práctica y trabajo a desarrollar una buena relación entre el cuerpo, la psique y el entorno. Encarnan los principios de un cuerpo integrado en relación con la fuerza gravitatoria de la Tierra. Las personas que vienen a recibir trabajo suelen sintonizarse con ello, normalmente sin darse cuenta de ello, incluso antes de decir ni hacer nada.

Por tanto, aunque un/a practicante en formación tenga menos experiencia y recursos que una persona que lleva años aplicando el DFA Reconocimiento de Patrones Somáticos en el trabajo con sus clientes, las sesiones supervisadas impartidas por practicantes de DFA en formación pueden ofrecer una gran ayuda. Pueden iniciar transformaciones importantes y enseñar las herramientas necesarias para llevarlas a cabo y sostenerlas a lo largo de los años.